Disponer de un marco ético para el periodismo aporta reglas de trabajo claras y permite generar mejores prácticas del ejercicio profesional para producir información de calidad.

Además, una ciudadanía bien informada, es una ciudadanía que decide por sí misma, en base a información veraz, originada en fuentes confiables y creíbles.

El compromiso es mantener el debate de mejorar la calidad informativa, y fortalecer los mecanismos que alienten un mejor periodismo, que no es otra cosa sino un síntoma de una sociedad integrada, libre y democrática.